Pero aquí cada uno tiene y recibe lo que se merece.
Das lo que recibes.
Recibes lo que das.
El problema viene cuando eres incapaz de dejar de dar todo lo que eres a alguien,
y tan siquiera sabe que existes.
Que estás.
Que eres.
Y que siempre has estado.
Y que siempre vas a estar.
Y que siempre has sido.
Pero ya no vas a ser más.
No quieres ser más.
Los lunes dan bastante que pensar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario